La autonomía en los niños
Ansiedades y miedos en los niños
Los padres enseñan a sus hijos a ser temerosos y cautelosos ante peligros específicos, como el fuego o cruzar la carretera. En estos casos, la ansiedad puede ser útil, porque ayuda a proteger al niño del daño. Sin embargo, los niños pueden temer situaciones u objetos que los adultos no encuentran amenazantes.
Las fuentes de miedo pueden cambiar a medida que el niño madura. Por ejemplo, el miedo a la oscuridad o a los monstruos debajo de la cama puede dar paso a temores de robo o violencia. Las tácticas que no funcionan incluyen burlarse del niño por tener miedo o forzarlo a enfrentar situaciones aterradoras.
Ayude a su hijo a lidiar con el miedo tomando sus sentimientos en serio, animándolo a hablar sobre sus ansiedades, contándoles los hechos y dándoles la oportunidad de enfrentar sus miedos a su propio ritmo y con su apoyo.
El niño temeroso
Algunos niños tienen más miedo que otros. Los factores que contribuyen pueden incluir:
- Susceptibilidad genética – algunos niños son generalmente más sensibles y emocionales en su temperamento
- Al menos un padre ansioso – los niños aprenden a comportarse al ver a sus padres
- Crianza sobreprotectora: es más probable que un niño dependiente se sienta indefenso y esto puede conducir a ansiedad generalizada.
- Eventos estresantes, como separación parental, una lesión o hospitalización.
Temores comunes para los bebés
Una vez que un bebé ha alcanzado los seis o siete meses de edad, ha formado fuertes apegos a sus padres o cuidadores. La separación de su "pueblo especial", incluso durante cortos períodos de tiempo, puede causar ansiedad considerable y mucho llanto. Del mismo modo, muchos bebés prefieren la compañía exclusiva de su gente especial tanto que desarrollan el miedo a los extraños por un tiempo. Los bebés crecen fuera de esta fase con el tiempo.
Las sugerencias para ayudar a tu bebé a lidiar con la ansiedad por separación y el miedo a los extraños incluyen:
Siempre que sea posible en casa, si su bebé se enoja cuando se vaya, lléelos de habitación en habitación o hable con ellos cuando esté fuera de la vista.
Dígale a su bebé cuando salga de la habitación (o salga) y anuncie su llegada cuando regrese. Esto les ayuda a confiar en ti.
Permita que su bebé conozca a nuevas personas desde la seguridad de su regazo. Hazles ver que sabes que la nueva persona está bien.
Si su bebé está ansioso, tranquilízalos con una expresión tranquila y confiada.
Dejar que su bebé 'llore' solo empeorará su ansiedad.
Temores comunes para los niños pequeños
Los niños de entre dos y tres años de edad apenas están empezando a aprender a lidiar con sus sentimientos fuertes, como la ira. Un temor común para un niño pequeño es que se sentirá abrumado por emociones poderosas.
Los niños pequeños tienen una comprensión limitada del tamaño y pueden desarrollar temores aparentemente irracionales, como caerse por el agujero o el inodoro.
Las sugerencias para ayudar a su hijo pequeño incluyen:
- Anime a su hijo a hablar sobre sus miedos y ansiedades.
- Aprecie que los temores como caer por el agujero se sientan genuinos para el niño, porque los niños pequeños aún no entienden sobre el tamaño y el espacio.
- No obligue al niño a confrontar su objeto de miedo, porque esto puede empeorar las cosas. Ayúdales a acostumbrarse lentamente.
- Acepte que usted puede tener que ayudar a su hijo a evitar el objeto temido por un tiempo.
Temores comunes para los niños en edad escolar primaria
A medida que un niño aprende más sobre el mundo, la lista de cosas que teme tiende a crecer. Algunos temores son reales y otros imaginarios. Los temores comunes incluyen el miedo a la oscuridad, el robo, la guerra, la muerte, la separación o el divorcio de sus padres, y los seres sobrenaturales (como fantasmas y monstruos).
Las sugerencias para ayudar a su hijo incluyen:
- Hágale saber a su hijo que usted se toma en serio sus miedos.
- Dé a su hijo información veraz sobre temas como la muerte o la guerra, y hágale saber que está dispuesto a responder cualquier pregunta.
- Anime a su hijo a confrontar el objeto de su miedo, como los perros, paso a paso a su propio ritmo. Por ejemplo, tal vez comience con imágenes, luego pruebe un perro muy pequeño y suave que esté atado, para que el niño decida qué tan cerca debe estar.
- Permita que su hijo controle. Por ejemplo, si tienen miedo de los intrusos, haga que cerrar y cerrar la ventana de su dormitorio sea una de sus responsabilidades nocturnas.
- Las rutinas y rituales diarios le dan a un niño una sensación de estabilidad y seguridad, y pueden aliviar la ansiedad general.
Miedo a la oscuridad
Muchos niños le temen a la oscuridad. Un niño pequeño o preescolar tiende a tener miedo de cosas desconocidas que no entienden o que no pueden controlar. Su imaginación activa, y su incapacidad para distinguir siempre entre la realidad y la fantasía, significa que pueden creer que los monstruos están debajo de la cama o en el armario esperando a la primavera una vez que la luz se apaga.
Si quieres conocer otros artículos parecidos a La autonomía en los niños puedes visitar la categoría Psicología.
Deja una respuesta